La Autonomía Material de Leonor Antunes

A secluded and pleasant land. In this land I wish to dwell, 2014
Instalación

A través de los años, la práctica artística de Leonor Antunes se ha enfocado en la detallada observación de espacios expositivos o contextos de los cuales éstos se derivan. Es así como la medición precisa y la réplica exacta de estructuras existentes se convierten en elementos centrales de una estrategia artística minimalista que depende en gran parte de la herencia conceptual y el conocimiento tradicional para ser ejecutada.

La metodología de Antunes involucra en su mayoría el uso de elementos pre-existentes y objetos que tienen orígenes arquitectónicos. La artista investiga los efectos de estos elementos cuando son duplicados o recolocados en contextos espaciales o temporales totalmente ajenos a su origen, y qué sentimientos o emociones éstos adquieren sobre dicho desplazamiento. Su interés en las artes manuales y artesanías se hace presente en el uso de materiales como la madera, el bambú, el cuero, la cuerda y las tiras. Frecuentemente se pueden identificar estos materiales en su forma escultórica en demarcaciones horizontales o verticales del espacio, o como redes o cuadrículas. Su obra justifica la autonomía del material sobre la forma y crea cierta autonomía en su significado. Nociones tales como medición, escala o proporción también juegan un papel importante.

Leonor Antunes entiende su obra como un híbrido de técnicas vernáculas y el legado cultural del modernismo. Esto se puede ver en la selección de materiales y su tratamiento, los cuales frecuentemente surgen de las tradiciones manuales y artesanales. Su referencia al legado del modernismo es fácilmente reconocible en el uso de estampados geométricos, así como de las formas y estructuras desarrolladas por los arquitectos y diseñadores de inicios del siglo XX. Sus investigaciones incluyen referencias a los muebles y edificaciones del arquitecto Irlandés Eileen Moray Gray (1878 – 1976) así como de aquellas creaciones de la brasileña Lina Bo Bardi (1914-1992).

Instalación en el Pérez Art Museum Miami

En años recientes, los proyectos de Leonor Antunes basados en la investigación han desarrollado un vocabulario material particular a través de su uso recurrente de ropa, cuero, maderas inusuales y latón. La artista pone a estos y otros materiales naturales en diálogo con tanto el diseño modernista internacional y la arquitectura de los años 1950 y 1960, como con las tradiciones indígenas artesanales de contextos culturales europeos y no-occidentales. Empleando medidas, repeticiones e duplicaciones, sus instalaciones escultóricas retoman estos sitios y estas formas, confiriéndoles subjetividad y una energía renovada que los coloca en conversación con diversas prácticas del arte contemporáneo.

El título : A secluded and pleasant land. In this land I wish to dwell (2014) (una tierra recóndita y agradable. en esta tierra deseo habitar) se deriva de una leyenda relacionada con la creación del Santuario Naikū Ise, un santuario shinto dedicado a la diosa Amaterasu-ōmikami en el sureste de Japón. Los edificios de madera que constituyen este sitio sagrado son desmantelados y luego reconstruidos exactamente de la misma manera cada 20 años en un ritual diseñado para preservar las técnicas tradicionales de construcción y para actuar como símbolo de la impermanencia. A través de esta recreación cíclica, las estructuras son tanto continuamente antiguas como renovadas. Esta práctica refleja el interés de Antunes por repetir las construcciones de formas pasadas, y a través de estas recreaciones, su crítica de los valores modernistas relacionados con el tiempo lineal y la originalidad. El título también es una referencia al concepto de “habitar” —ocupar un espacio tanto física como psicológicamente a través de las proporciones particulares corporales de uno y de su implicación emocional —que profundamente forma la manera de pensar de la artista.

Matemáticas, medidas, escalas y la belleza de la proporción impulsan su práctica, tal como puede ser visto en la obra de la Colección Adrastus: A secluded and pleasant land. In this land I wish to dwell (2014). Esta obra realiza un diálogo entre los espacios que ocupa al hacer eco en la arquitectura y el uso de sus proporciones como herramientas de desarrollo para una nueva instalación. Para esta obra, Leonor Antunes produjo una instalación escultural en la cual se considera el latente desempeño de su práctica en conjunto con los efectos del tiempo y el espacio en los materiales.

Varios de los elementos de la instalación están relacionados con las investigaciones llevadas a cabo por Antunes en Brasil a lo largo de la última década. Últimamente, las investigaciones de la artista han incluido la obra del arquitecto modernista brasileño João Batista Vilanova Artigas (1915–1985). En 2013, la artista visitó la casa que construyó para su familia en São Paulo en 1949 y tuvo la oportunidad de medir y registrar de forma detallada las dimensiones de sus habitaciones. Una cortina hecha de tubos delgados de latón, colgada frente a las paredes de vidrio que encierran esta galería, reproduce el patrón lineal y las medidas exactas de un piso de parqué que se encuentra en la sala principal de estar de la casa de Vilanova Artigas.

La cuadrícula tiene un papel importante en la práctica de Antunes, quien emplea la forma usando varios materiales diferentes en esta obra. Su interés por esta estructura se deriva no sólo del papel que juega en la práctica arquitectónica, sino también de su prevalencia en la obra de varios artistas de la posguerra. De forma más directa, sus cuadrículas caídas, que combinan un sentido de orden matemático con referencias a telarañas y a nidos, evocan estructuras similares usadas por la artista venezolana Gego (Gertrud Goldschmidt, 1912-1994) y por la artista estadounidense Eva Hesse (1936-1970). Las cuadrículas de Antunes también están directamente vinculadas con su interés por preservar y celebrar las tradiciones artesanales de su natal Portugal, en particular las redes de pesca hechas a mano. Trabajó de aprendiz con varias personas mayores que practican este arte en peligro de extinción, y aprendió a tejer estos objetos a mano. Reflejando estas influencias, varias redes densamente tejidas se encuentran colgadas en esta instalación, hechas de cuerda de cáñamo y de hilo negro de nylon. Están tejidas sin nudos, usando una técnica que se emplea para hacer hamacas que la artista aprendió de otra tribu indígena de la Amazonia. Otra cuadrícula más, hecha de bridas de caballos entretejidas, artesanía oriunda de Portugal que también está a punto de desaparecer, fue producida por la artista en cuero negro.

Lorena y Javier Lumbreras, Fundadores de la Colección Adrastus en el New Museum, NY.

A secluded and pleasant land. In this land I wish to dwell (2014) ha sido presentado en Kiosk Gallery (2015) en Ghent, Bélgica; New Museum (2015), New York, USA; Pérez Art Museum (2015), Miami, USA; 8th Berlin Biennale, KW Institute of Contemporary Art (2014), Berlin, Alemania.

Entre sus recientes exposiciones individuales se incluyen: PAMM, Pérez Art Museum Miami, U.S.A. (2014); “the last days in Chimalistac”, Kunsthale Basel, Basel, Switzerland (2013); “a linha é tão fina que oolho, apesar de armado com uma lupa, imagina-a ao invés de vê-la”, Kunsthalle Lissabon, Lisbon, PT (2013); “sculpture for travelling”, Kunstverein Harburger Bahnhof, Hamburg, DE (2012); “Assembled, moved, re-arranged and scrapped continuously”, Marc Foxx Gallery, Los Angeles, US and Air de Paris Gallery, Paris, FR (2012). Entre sus recientes exposiciones colectivas se encuentran: 8th Berlin Biennial, KW, Berlin; “Behind the super square”, Bronx Museum, NY, U.S.A; “Ökonomie der Aufmerksmkeit”, Kunsthalle Wien, Austria. C; “Pier 54”, High Line, NY. U.S.A. curado por Cecilia Allemani (2014).